Una camiseta digna de aparecer en carteles anunciadores de exposiciones del horterismo. A partir de ahí, el futbolista decide si prefiere regalarla, equipacion inter de milan 2022 23 intercambiarla con un rival o simplemente dejarla en su taquilla del vestuario para que sea lavada y reutilizada. Que si hubiera sido así habría sido el acabose. La primera vez que vi la foto pensé que el color tostado de la parte inferior pertenecía a un maniquí y que la camiseta terminaba en los flecos.